EE.UU. y Gran Bretaña deben mantener su promesa de
exigir la expulsión del régimen de Assad por la UNESCO
Grupo de Derechos Humanos: "la membrecía de Siria es una persistente mancha sobre la reputación de la ONU en su conjunto"
GINEBRA,
16 de agosto - La suspensión de Siria, ayer, de la
Organización de Cooperación Islámica, constituida por 57 naciones, crea una
nueva ventana de oportunidad para que el importante Comité de Derechos Humanos
de la ONU cancele su "vergonzosa" elección de noviembre del régimen
de Bashar al-Assad, dijo la UN Watch, una organización de derechos humanos con
sede en Ginebra, que encabeza una campaña de 55 grupos parlamentarios, de
derechos humanos y religiosos que piden la expulsión de Siria.
"Ahora que, tanto la OCI como la Liga
Árabe, han suspendido a Siria, ya no hay excusa alguna - ni moral ni política -
para que la UNESCO insista en mantener al régimen de Bashar al-Assad en su
Comité de Derechos Humanos, cuyo mandato es ayudar a víctimas en todo el mundo.
Es hora de que la UNESCO deje de legitimar a un gobierno que, sin piedad,
asesina a su propio pueblo, dijo Hillel Neuer, director ejecutivo de UN Watch.
"Tener
a Siria como un juez mundial de los derechos humanos es como designar a un
piromaníaco como bombero", dijo Neuer".
La UNESCO está permitiendo que el régimen de Assad se pavonee en París como un
árbitro de derechos humanos de la ONU -- ésto es inmoral, inexcusable y un
insulto a las víctimas de Siria".